domingo, 4 de septiembre de 2011

Monstruos


Algunos días noto que saco lo peor de la gente, el mal humor, la impaciencia, la desesperación ...
Supongo que hay cosas que pueden sacar el lado malo que todos tenemos dentro, y supongo que en el fondo lo único que diferencia a una persona normal de un monstruo es una buena razón.
Algo que tienen en común los monstruos, es que aparecen por sorpresa cuando menos lo esperas.

A mí los monstruos que más miedo me dan son los fantasmas, porque todo lo que no ves resulta más aterrador. Pero intuyes que están ahí, como el fantasma de la muerte. También hay fantasmas buenos, son los fantasmas de las personas a las que quieres y ya no están y parecen infundirte ánimos desde un lugar desconocido.

En algunas ocasiones el fantasma del fracaso es especialmente chungo. Y luego está el fantasma de la soledad, que es algo así como estar con el hombre invisible. Lo que pasa es que no te coge de la mano, ni te mira a los ojos.

Los Monstruos existen, y están entre nosotros, los mas temibles ni siquiera lo parecen, pero la mayoría de las veces nos los inventamos.

A veces ves monstruos por todas partes y sin darte cuenta, te conviertes en el monstruo que vive escondido porque tiene miedo de que se rían de él, de que le hagan daño. Estás a gusto en el silencio, en la oscuridad.

Muchas veces los monstruos lo son porque nadie ha intentado comprenderles. Todos llevamos un monstruo dentro, el dolor hace que salga fuera, pero con un poco de comprensión, con un poco de luz, puedes sentarte a cenar con el monstruo y conocerle un poco mejor, y convencerle de que no está solo, de que ahí fuera hay todo un mundo lleno de vida. Y de que puede saltar de un cuento para no dormir a un cuento para soñar toda la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario